Pronunciamiento
¡NO A LA PRIVATIZACIÓN DE LAS EMPRESAS DE SERVICIO DE AGUA!
El Sindicato Único de trabajadores de Sedapal- SUTESAL, ha denunciado que la dictadura de Dina Boluarte pretende entregar la principal empresa de agua Sedapal al sector privado, mediante el cambio de propiedad de la empresa y dividiéndola en tres partes.
El SUTESAL rechaza rotundamente las medidas propuestas, por la ministra de Vivienda Hania Pérez de Cuellar, que tienen como único objetivo privatizar Sedapal. Señalan que están proponiendo una “Ley” para modificar la forma de propiedad de la empresa, que debe ser presentada por el Ministerio de Vivienda y el Fondo Nacional de Financiamiento de la Actividad Empresarial del Estado (Fonafe), en un plazo máximo de 180 días. Actualmente, Sedapal es una empresa 100% publica; sin embargo, el documento no define a quién se le otorgará la propiedad.
En ese sentido, los trabajadores sostienen que esto forma parte de un proceso de entrega de la empresa estatal, al sector privado, y cuya primera “opción” es una empresa mixta.
Además, también a mediano plazo, proponen dividir la empresa en “tres partes” (norte, centro y sur), para así otorgarla en concesión, a operadores privados, a través de Asociaciones Públicas Privadas (APP).
Ya conocemos la cantaleta de los neoliberales que buscan ahogar a las empresas públicas, tratando de demostrar la “ineficiencia de las empresas del Estado”, y de esa manera justificar su remate a favor de los grandes intereses privados. Lo mismo quieren hacer con la empresa Petroperú.
Es por ello que el SUTESAL y otras organizaciones sociales han convocado a una marcha el 22 de marzo contra la privatización de Sedapal y las empresas de agua de todo el país.
Expresamos nuestro total respaldo a los trabajadores y organizaciones sociales en la defensa de la empresa pública del agua potable y demandamos que se respete el derecho humano de todos a un acceso al agua potable de calidad.
Esta ofensiva privatizadora es parte de la agenda de la dictadura de Dina Boluarte y el Congreso mafioso. Por eso exigimos elecciones generales, Nueva Constitución para una Nueva República.
19 marzo de 2024
